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Le BOLCHEVIK: “La izquierda francesa: apoyo abierto, o enmascarado, a la opresión de los catalanes" (1)


 
LA IZQUIERDA FRANCESA:
APOYO ABIERTO, O ENMASCARADO,
A LA OPRESION DE LOS CATALANES
(1. zatia / 1.ª parte)


Le BOLCHEVIK
Liga Komunista Internazionala; 2017ko abendua
(traducción no oficial, fotos elegidas por trotskistak.blogspot)


L

a ruptura del Estado español chauvinista castellano, con su monarquía y sus nostálgicos del franquismo, representaría un inmenso paso hacia adelante para las luchas de todos los trabajadores de España contra la burguesía. La lucha de liberación nacional de Catalunya y Euskal Herria está íntegramente ligada a la lucha por destruir el dominio capitalista en toda España y en toda Europa. Para que los trabajadores y los oprimidos lleven a cabo esta lucha, hacen faltan partidos de vanguardia leninistas-trotskistas, secciones nacionales de una 4.ª Internacional reforjada. Hemos avanzado esa perspectiva durante este otoño en las movilizaciones sobre Catalunya. ¡Abajo la monarquía española! ¡Independencia para Catalunya! ¡Por las repúblicas obreras! Spartacist.org

Sin embargo, la izquierda francesa se distingue, ya sea por su claro chauvinismo contra los catalanes; ya sea, en el mejor de los casos, por las circunvoluciones que conducen a justificar el mantenimiento por la fuerza de Catalunya bajo el yugo español (y francés): de acuerdo a lo que conocemos, somos los únicos en defender la lucha por la independencia en la parte norte de Catalunya (La Cerdanya y Rosselló). La izquierda francesa, en cambio, acepta en general la mitología de su propia burguesía al sostener que con la Revolución francesa la cuestión nacional habría sido resuelta positivamente para siempre en todo el Hexágono (Córsica inclusive).

No hay duda de que este chauvinismo está ligado al hecho de que la independencia de la parte sur de Catalunya tendría un profundo impacto en el norte y pondría en duda las mugas sacrosantas del Hexágono, así como acelerar la hora del hundimiento ineluctable de la imperialista Unión Europea. De ahí la actividad anticatalana de Macron, Merkel, etc.

Macron, en eso, efectivamente no está aislado en el espectro político francés. Puede que sea el populista burgués Jean-Luc Mélenchon el más explícito al respecto. Ha denunciado “la enfermedad que empuja a la atomización de los Estados-nación” y se ha lamentado en el parlamento, a propósito de Catalunya, de que “la monarquía parece incapaz de asumir la función federal que el franquismo le confió”. Ha propuesto al gobierno francés que intervenga en España antes de que todo esto degenere y no “venga, al final, a afectar la patria republicana de los franceses”. Coincide en ello con Manuel Valls, ese traidor a la clase obrera y traidor al pueblo catalán.
 Le Pen eta Mélenchon, bostekoa ematen
El chauvinismo francés antialemán de Mélenchon no ha impedido al PCF ni al POI lambertista hacer campaña a favor de él en las últimas elecciones presidenciales. Gauche Révolutionnaire (Comité por una Internacional de los Trabajadores) así como sus hermanos enemigos de la “Tendance Marxiste Internationale” están totalmente enterrados en la F.I. de Mélenchon (France Insoumise, un partido burgués). No es por tanto sorprendente que Mélenchon imprima su marca, incluso dentro del movimiento obrero, en lo que a la cuestión catalana se refiere.

Las  manifestaciones de apoyo al pueblo catalán, o mismo simplemente las protestas contra la represión que han sufrido los electores y los militantes nacionalistas [catalanes], han sido reducidas en Francia. Sin embargo, no ha sido la simpatía espontánea por los catalanes lo que ha faltado entre los trabajadores de Francia, como lo hemos podido constatar con el éxito de nuestra campaña de abonos de este otoño y el interés surgido por el nuevo número de nuestra revista internacional Spartacist, centrada sobre cómo el leninismo enfoca la cuestión nacional. El odio al franquismo (aunque haya sido canalizado hacia la colaboración de clases del frente popular) es una viva tradición en el movimiento obrero, y los trabajadores de España y Francia pueden y deben ser movilizados en aras de la lucha por la independencia de Catalunya.

La responsabilidad central de esta falta de movilización cae sobre el PCF, que sigue siendo el principal partido de la clase obrera de este país. Aunque denunció la represión contra Catalunya y ha demandado la suspensión del artículo 155 del gobierno español, ha exigido también, para “compensar”, “la suspensión de la declaración unilateral de independencia y la convocatoria de nuevas elecciones para la presidencia de la Generalitat” (declaración de Pierre Laurent el 29 de octubre).
Pierre Laurent (PCF), nazionalista frantsesa

El PCF, tomando las órdenes de sus antiguos camaradas españoles hoy liquidados en Izquierda Unida (que a su vez va a la cola de los chauvinistas burgueses españoles de Podemos), está a favor de una revisión constitucional buscando la unidad de España mediante un marco más federal: contra la independencia.

¡ Lutte Ouvrière ha logrado su hazaña al situarse aún más a la derecha que el PCF en la cuestión nacional catalana! Leyendo sus artículos parece que ha tenido que ser obligada a denunciar (con la boca chica) la represión. El mensaje que difunde a la vista de sus numerosos artículos es que los trabajadores franceses deben abstenerse a toda costa de tomar partido por la lucha del pueblo catalán por su independencia.

En vísperas del referéndum brutalmente reprimido del 1 de octubre, Lutte Ouvrière (29 de septiembre) ha ordenado a sus partidarios no tomar partido: “De ninguna manera el mundo del trabajo debe sentirse concernido, ni solidario con enfrentamientos entre políticos que se disputan los puestos para mejor venderse  a una facción u otra de la burguesía local, regional, nacional, o internacional.”. Dicho de otro modo, mantener el statu quo opresor (ver nuestro artículo “LO, Voz Obrera et la Catalogne”, Le Bolchévik nº220, junio 2017)).  […]

Liga Comunista Internacional / Ligue Trotskyste

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